Universidad Aútonoma de Bucaramanga (Colombia)
Mi intercambio en Colombia, sin duda, será una las cosas que jamás olvidaré en mi vida, es que el vivir seis meses en Bucaramanga, capital de Santander es algo que te marca de por vida. En un principio su clima húmedo y de temperaturas altas sobre todo en la noche es algo a lo que cuesta acostumbrarse, pero con el tiempo pasa que no quieres dejarlo, su gente tan acogedora y su gastronomía tan distinta a lo que estaba acostumbrado son cosas que desde un comienzo hacen que le tomes un cariño enorme a esa ciudad que bien ganado tiene el nombre de “Ciudad Bonita” o “Ciudad de los Parques”.
Su flora, fauna y paisajes hermosos hacen la estadía más grata, aunque el transito caótico a veces en sus calles y su sin número de motos dificultan a ratos el acostumbrase aunque con el tiempo pasan a segundo plano.
Por otro lado está la UNAB, una universidad muy distinta a lo que estaba acostumbrado, un poco más pequeña en cuanto a infraestructura pero muy bella en cuanto a ubicación cubierta de naturaleza y de docentes que siempre se preocuparon por que comprendiera cada una de sus clases y se mantuvieron siempre atentos a mis dudas. No fue un semestre fácil, pero la calidad de las personas en la universidad y el trato siempre cordial para conmigo así como la relación con el resto de alumnos de intercambio hizo que todo fuera excelente.
Sin duda esta experiencia me marco de una manera muy muy profunda, siento que logre todo lo que me propuse, conocí los lugares hermosos que quería conocer y tuve la dicha de rodearme de gente hermosa que será difícil de olvidar y como no recordar a mi pequeña familia en Colombia, Latiffi Gomes, Kevin Camargo y nuestro perro Luzu que hicieron de mi estadía una experiencia inolvidable.